La joven Avery Hansen-White no emprende algo si no es la mejor en ello. Así que cuando su pareja, con la que tiene una relación a larga distancia, le deja entrever que quiere llevar su relación más allá del punto donde se encuentran, la chica se propone controlar su sexualidad con Larson (su mejor amigo) como sujeto de estudio científico. Una comedia adolescente, donde las pruebas de Avery le descubre que el sexo y el amor no son solo mecánicas: las relaciones requieren tanto cerebro como sentimientos.